Nefarious

He visto la película dos veces, con dos grupos distintos de seminaristas. Hemos conversado sobre ella y a continuación te resumo en siete puntos mi opinión sobre Nefarious.

1. Correcta teología. Es una película teológica, no es de terror. Podría decir que es una clase de teología, y de buena teología, en donde se resumen distintas ramas: angelología, cristología, espiritualidad, moral, antropología teológica y sagrada escritura.
2. Filosofía realista. Tiene una base filosófica buena, de metafísica realista, desde donde se abordan temas como la libertad, la ideología woke, filosofía política, las formas de ateísmo, el relativismo moral y la autodeterminación.
3. Aunque fue creada y dirigida por dos católicos, les faltó elementos esenciales. Nunca se habla del rol fundamental que Dios quiso que María cumpliese en la economía de la salvación, así como tampoco de la figura del Santo Padre o la necesidad de los sacramentos. Gen 3,15: «Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu linaje y su linaje: éste te aplastará la cabeza, y tú le aplastarás el calcañar.” Apoc 12, 17: «Y se enfureció el dragón contra la mujer, y se fue a hacer guerra contra el resto del linaje de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio de Jesús».
4. Verla acompañado. Por todo lo anterior, es un filme que requiere acompañamiento por parte de alguien competente. Alguien que tenga ideas claras sobre todos estos temas. Un sacerdote sería ideal. De lo contrario se corre el peligro de darle importancia a temas en realidad superficiales y a obviar otros que podrían ser más interesantes conversar con los espectadores.
5. Curiosidad. Un peligro al abordar temas de demonología, es que rápidamente puede suscitar curiosidad. Lo cual es un vicio que consiste en saber cosas que no te convienen, y en saberlas solamente por saciar un hambre vana de conocimientos. El mismo demonio se vale de esto y usa aquella curiosidad como una especie de puerta para darle más cabida a este ser en tu vida.
6. Evidencia al diablo. Sin embargo, es necesario saber que tenemos un enemigo, el diablo, que separa – porque la mentira y el odio nos separan de la caridad de Dios y del prójimo-  un enemigo que está siempre al acecho, como león rugiente, dice san Pedro (1Pe 5,8).
7. Ver a Dios. Por eso, creo que lo que debemos hacer al hablar de esta película es darle la vuelta, es decir, enfocar estos temas hacia Dios, no quedarnos en el demonio. Ver la acción real de los ángeles buenos en nuestra vida y todas las artimañas del demonio para que nos volvamos como Él.

En conclusión, mi recomendación es verla con un sacerdote, un religioso o alguien que pueda dar luces y pinchar globos acerca de estos temas. Sobre todo, que sepa usarlos para el provecho personal de cada espectador y que no queden dudas, ya que son temas muy importantes.

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Dios te bendiga.